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Sergio Javier Jiménez

Viernes 07 de septiembre de 2007

AUCKLAND, NUEVA ZELANDA.– El presidente Felipe Calderón señaló que la ceremonia del grito de Independencia no es propiedad de ningún partido polí­tico o de gobierno, y aseguró que estará la noche del 15 de septiembre encabezando esta fecha histórica en el Zócalo capitalino.

Convocó desde Nueva Zelanda ser respetuosos de los sí­mbolos patrios: de la bandera, el himno y el escudo nacionales.

Y emplazó a todos los mexicanos sumarse fielesá a las tradiciones nacionales, ya que este es el momento, dijo, de mostrar madurez para estar unidos en torno al paí­s y a esta gesta histórica. La declaración del mandatario mexicano se da mientras en la ciudad de México comenzó la disputa por los espacios en la Plaza de la Constitución para celebrar el grito de Independencia.

La ví­spera, la Convención Nacional Democrática, que encabeza Andrés Manuel López Obrador, anunció que en ese mismo lugar llevará a cabo una ceremonia para recordar la fecha heroica. El año pasado, el entonces presidente Vicente Fox Quesada tuvo que ceder el Zócalo para que el jefe del Gobierno del Distrito Federal en ese momento, Alejandro Encinas estuviera al frente de este acto desde el edificio del ayuntamiento.

Fox lanzó el grito y las aregnas de Independencia en Dolores Hidalgo, Guanajuato.

Inicia gira Calderon

El presidente Felipe Calderón arribó a Auckland, Nueva Zelanda, y en su primera actividad participó en una ceremonia tradicional del pueblo Maorí­, con un rito de guerra al que se debe responder de manera pací­fica.

Este viernes poco después de las 08:30 horas, Calderón llegó a la casa de gobierno en donde ya lo esperaba un grupo de hombres y mujeres con ropajes autóctonos que lo sumó a una ceremonia que incluyó el lanzamiento de una punta de lanza a los pies de Calderón. El grupo representativo del pueblo Maorí­, con gestos agresivos, gritos y con lanza en mano, tres de ellos amenazabaná al Presidente mexicano. El mandatario, sin apartar la vista de su opositor, levantó la punta de lanza y se dirigió hacia ellos.

A paso lento, acompañado de su esposa Margarita Zavala, se acercó al jefe del grupo y lo saludó como lo hace el pueblo Maorí­.

Calderón quedó unido al lí­der de la comunidad frente con frente, en un sí­mbolo de paz. Así­ se le dio la bienvenida a Felipe Calderón.

Los mismo hizo Margarita Zavala, quien en el mismo ritual tení­an que asumir el compromiso de respirar el mismo entorno que los representantes de esta comunidad.

Los hombres con el torso desnudo y algunos de ellos con tatuajes en brazos y espalda, además de portar en la cintura un faldón de pequeños carrizos, aceptaron la llegada de Calderón quien posteriormente de trasladó a un templete para que se entonará el Himno Nacional por las Fuerzas Militares de Nueva Zelanda.

Poco antes, el mandatario mexicano sostuvo una reunión privada con el empresas neozelandesas a quienes invitó a invertir en México.

Calderón Hinojosa tuvo un encuentro privado con Helen Clark, primera ministra de esta nación, a quien le reiteró su interés por estrechare los ví­nculos con su paí­s. Esta es la primera visita oficial que realiza un mandatario mexicano a este paí­s de Oceaní­a, aunque el ex presidente Ernesto Zedillo ya habí­a acudido durante su mandato a una reunión de la APEC.

En la madrugada de este viernes, hora local, Felipe Calderón llegó a Sidney, Australia, para participar en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pací­fico (APEC) y mantener diversas reuniones bilaterales con otros lí­deres de la región.