Chiapas: el partido de los paramilitares

Fuente:La Jornada del 2 de Octubre de 2007.

* Luis Hernández Navarro

Rafael Ceballos Cancino es apodado El Coyolito. Lí­der de los caficultores cenecistas en Chiapas, prií­sta de corazón, es un hábil operador en la prestidigitación de transformar la entrega de recursos públicos en votos. Sus méritos le fueron reconocidos con el nombramiento de presidente de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados en la 56 Legislatura (1994-1997).

En 1998, la Procuradurí­a General de la República lo investigó por formar, financiar y proteger al grupo paramilitar Los Chinchulines. Aún activa en los municipios de Chilón y Yajalón, esta formación fue responsable de más de 50 asesinatos, algunos de integrantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), de la destrucción de cosechas y casas, así­ como del robo de ganado, maí­z y frijol.

Con la llegada de Juan Sabines Guerrero a la gubernatura de Chiapas, Coyolito fue nombrado coordinador del programa estrella de la nueva administración: el Convenio de Confianza Agropecuaria (Codecoa), originalmente creado 26 años atrás por el gobernador sustituto de la entidad, Juan Sabines Gutiérrez, padre del actual mandatario y uno de los responsables de la matanza de Wolonchan, en mayo de 1980, en la que murieron más de 50 indí­genas.

Hoy, Rafael Ceballos ocupa el quinto lugar de la lista plurinominal del PRD para los comicios del próximo 7 de octubre, el partido al que combatió toda la vida. Siguió al filósofo del trapecismo polí­tico, Roberto Albores, bautizado por los zapatistas como El Croquetas, sangriento ex gobernador de Chiapas y actual aliado del gobierno perredista de la entidad, quien asegura: La polí­tica es cambio, y las confrontaciones no son eternas; la polí­tica es cambio, circunstancia, coyuntura; no existe el determinismo, ya que lo de hoy puede ser distinto a lo del mañan

Ceballos no es el único paramilitar postulado por el partido del sol azteca. En sus listas abundan responsables de reprimir a organizaciones populares, torturadores y polí­ticos que han amenazado de muerte a periodistas. Ése es el caso de José Uriel Estrada Martí­nez, aspirante a la presidencia municipal de Simojovel y, hasta antes de su postulación, secretario particular del subsecretario general de Gobierno, Ángel Córdova Toledo, primer lugar de lista plurinominal del sol azteca.

Un llamamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA lo considera responsable de la detención ilegal, tortura y ejecución extrajudicial, en diciembre de 1995, del campesino Reyes Penagos Martí­nez. El pasado 20 de febrero, frente al gobernador, Everilda Robledo, viuda del labriego, señaló: A mi marido lo mataron y no he visto a los responsables en la cárcel; pido y exijo que lo más pronto posible sean detenidos Jorge Enrique Hernández Aguilar y Uriel Estrada, porque sé que trabaja aquí­ en palacio de gobierno Sin embargo, en lugar de promover que sea metido en prisión, el PRD quiere hacerlo edil.

Lo mismo sucede con el ex prií­sta Mariano Rosales, candidato a alcalde de Villaflores. En octubre de 2005, cuando era titular de la dirección de protección ciudadana y vialidad municipal de San Cristóbal, amenazó de muerte a la editora de La Foja Coleta, Concepción Villafuerte.

La mayorí­a de las más importantes candidaturas perredistas fueron ocupadas por funcionarios de la administración del gobernador Sabines. Cuatro de los cinco primeros lugares en las listas de representación proporcional y 23 aspirantes a alcalde son piezas del mandatario.

El PRD se ha convertido en el instrumento a través del cual se han recompuesto algunos de los grupos de poder más atrasados en Chiapas. El sol azteca es el vehí­culo de la restauración prií­sta. Tanto así­ que Juan Sabines declaró sobre El Croquetas: Hemos hecho equipo con Albores. Coincidimos en muchas cosas. Es un apasionado de la polí­tica con muchos valores como ser humano

Esta realidad es reconocida por los más nefastos integrantes del tricolor. Jorge Constantino Kanter, alcalde de Comitán y representante de los ganaderos en 1994, aseguró a Proceso: Juan Sabines es prií­sta. Obtuvo el registro por otro partido. Sabines fue diputado y alcalde por el PRI, como hijo del ex gobernador Juan Sabines Gutiérrez sigue siendo prií­sta, por eso lo apoyamos

El mismo gobernador confesó a Mario Vázquez Raña: Yo no renuncié al PRI, Mario, yo no renuncié a su militancia, a su gente.á

Esta cultura polí­tica ha sido sistemáticamente corroborada en los actos de Sabines. Apenas el pasado 13 de agosto, hizo publicar en varios periódicos nacionales un desplegado titulado De la vista nace el amorá, en el que agradece a Margarita Zavala haber financiado operaciones de cataratas para 300 mexicanos pobres. El costo de la publicación debió de estar muy cerca de lo gastado en las intervenciones médicas.

Aunque el PRD finge no darse cuenta, el gobernador ha buscado distanciarse lo más posible de Andrés Manuel López Obrador. Durante la gira del Peje al estado, el candidato del mandatario local a la alcaldí­a de Tuxtla Gutierrez, Sergio Valls, mejor no llegó al mitin del gobierno legí­timo.

El gobernador Sabines ha procurado acercarse a Felipe Calderón. No le escatima elogios. Nosotros comentó a Mario Vázquez Raña estamos construyendo una buena relación con el señor presidente Felipe Calderón, quien ha demostrado su aprecio y su cariño por Chiapas y por su gente. Con él hemos estado trabajando los temas que más le duelen a los chiapanecos, y hemos encontrado un Presidente sensible, un Presidente atento, generoso (...) México lleva un buen rumbo con Felipe Calderón (...) debemos desearle el mejor de los éxitos.á

El PRD pactó un matrimonio de conveniencia con Juan Sabines. Acogió como su familia a la escoria de la clase polí­tica local, a paramilitares, torturadores y caciques. Piensa que así­ puede ganar votos y presumir que controla un estado. Muy su gusto. Lo que no puede pretender es que en Chiapas es de izquierda. Para vergí¼enza de sus muertos y de los luchadores honestos que militan en sus filas, en el estado el PRD es partido de los paramilitares, torturadores y caciques. Punto.