Proceso
de la redacción

* Llama a levantar la vozá y demandar castigo ejemplará contra los soldados violadores

México, D.F., 2 de octubre (apro-imac).- El obispo de Saltillo, Raúl Vera López, lamentó el corto alcance de la sentencia judicial contra los militares que abusaron sexualmente de 14 mujeres en la zona de tolerancia de Castaños, en julio de 2006.

Sostuvo que el hecho de que sólo cuatro de los ocho soldados enjuiciados hayan sido sentenciados, uno de ellos por lesiones y, el resto, por violación, mantiene la puerta abiertá para que miembros del Ejército Mexicano sigan realizando todo tipo de atropellos.

En un comunicado difundido este martes, monseñor Vera recordó que los militares, que no fueron ocho, sino 20 los que participaron en los hechos de Castaños, mantuvieron retenidas contra su voluntad a las mujeres, en una acción equiparable al secuestro. Las sexo servidoras y las bailarinas fueron objeto de tratos humillantes, inhumanos y degradantes, amén de que fueron amenazadas de muerteá, dijo

El jerarca católico lamentó, sin embargo, que el juez hubiera pasado por alto todos esos elementos y exculpara a cuatro de los ocho soldados juzgados.

Según Vera, dicha sentencia no es un caso aislado en el paí­s. Indicó que responde a un patrón de conducta de las autoridades civiles que tienen que resolver asuntos relacionados con agresiones cometidas por militares.

Inconforme con la resolución judicial, el obispo hizo un llamado a la sociedad y a las organizaciones sociales para levantar la vozá y demandar un castigo ejemplará contra los agresores de las mujeres de Castaños.

Sostuvo que la debilidad con la que actuaron la defensa de las ví­ctimas, el Ministerio Público y el juez en el juicio, afecta no solamente a las personas injuriadas y a sus familias, sino que a todos los ciudadanos de Coahuila y del paí­s.

"Nos invita a quienes, como ciudadanos organizados en agrupaciones de diversa í­ndole, buscamos mejorar y elevar la calidad de vida en México, en la defensa de los derechos humanos, en la búsqueda de una verdadera democracia, en la lucha contra la impunidad, o en otras", dijo.

"(Nos invitá a quienes desde nuestra fe cristiana y desde la confesión de las distintas religiones, trabajamos por un México más justo y solidario, en donde se preserve el Estado de derecho, a que nos enlacemos y solicitemos a las autoridades correspondientes que deben intervenir en la apelación contra este débil juicio.

"O integrar los tres casos que aún quedan pendientes, para que se mejore la calidad y profesionalidad de la defensa y se logre así­ calificar desde un juicio justo, con mayor rigor, el alto grado de ilegalidad con el que actuaron los militares y se les aplique el castigo correspondiente con la gravedad de los delitos que cometieron", concluyó.