En la ceremonia de clausura del VII Congreso Internacional de Turismo, el mandatario pidió a los industriales del ramo frenar el deterioro ambiental

Fernado Pedrero
El Universal

Ciudad de México

Viernes 05 de octubre de 2007

El presidente Felipe Calderón Hinojosa lanzó un llamado a empresarios turí­sticos a frenar el deterioro ambiental y la autodestrucción, e impulsar un sector turí­stico sustentable que acorte la brecha de la desigualdad y la pobreza.

Afirmó que el gobierno y los empresarios deben encontrar el equilibrio: combatir a la pobreza extrema a través de preservar la naturaleza, y al mismo tiempo dar opciones a aquellas comunidades indí­genas, marginadas que subsisten gracias a esta actividad, para que precisamente no sea la miseria la causa de la devastación del paí­s.

"El preservar el medio ambiente es una ví­a para combatir la miseria, porque las mexicanas y los mexicanos que más sufren la destrucción de la naturaleza paradójicamente son los más pobres", subrayó.

En la ceremonia de clausura del VII Congreso Internacional de Turismo, organizado por el Consejo Nacional Empresarial Turí­stico (CNET), el primer mandatario advirtió que si la actual civilización no es capaz de frenar el deterioro del medio ambiente, eso la llevará a la autodestrucción. Añadió que a esta civilización le ha tocado desenterrar a tantas civilizaciones antiguas como la egipcia, la zapoteca, la maya o la teotihuacana, pero a pesar de ver cómo terminaron otras, ello no ha caí­do plenamente en conciencia de su propia mortalidad.

"Y la mayor amenaza que tiene la civilización contemporánea esta precisamente en el deterioro y la destrucción del medio ambiente", subrayó.

Destacó que hoy, en que México y el mundo viven amenazados por su capacidad de destrucción de la naturaleza, quienes más sufren son los más inermes, los más desprotegidos. "Precisamente, por ello combate a la pobreza, desarrollo económico y protección de la naturaleza deben ir de la mano", aseveró.

Ante poco más de 300 asistentes, Felipe Calderón demandó de los empresarios turí­sticos nacionales e internacionales que invierten en el paí­s a hacer de la actividad turí­stica un negocio rentable, pero también una herramienta para el progreso del paí­s, ya que en la medida de que tenga éxito México como un destino turí­stico se traducirá en un bienestar para millones de mexicanos.

Explicó que la tarea del gobierno y de los empresarios turí­sticos es el de constituirse en detonantes del desarrollo local y regional y al mismo tiempo generar un ambiente del medio ambiente que garantice la supervivencia de la naturaleza y los polos de desarrollo económico que se generan a su alrededor.

"Los principales problemas que enfrenta el paí­s están correlacionados. La miseria está correlacionada con el deterioro del medio ambiente, y quizá el peor enemigo de la naturaleza es precisamente la miseria, la enorme necesidad que tienen las comunidades más marginadas de mexicanas y mexicanos de subsistir y lo realizan a partir de no tener otras opciones, de terminar con el medio ambiente que los rodea", dijo.

No obstante, comento que las nuevas tendencias de turismo favorecen al paí­s, ya que México tiene un enorme potencial en este aspecto, en la visita y conocimiento, disfrute de la naturaleza que queda, lugares que están cerca de comunidades marginadas y que tienen q