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Oaxaca, y en general el sur-sureste, ha sido excluido del Programa Nacional de Infraestructura 2007-2012, sostuvo el secretario de Economí­a, Enrique Sada Fernández.

"No es posible que mientras el centro y norte del paí­s cuentan con más de 20 sistemas multimodales operando, en el sur-sureste no exista ninguno, y que el primero que se pretende reactivar, como lo es el Sistema Logí­stico del Istmo de Tehuantepec, no sea considerado como prioridad para el gobierno federal", señaló.

De acuerdo con el Programa Nacional de Infraestructura que propone la actual administración federal se da prioridad a los proyectos en las zonas centro, occidente y norte del paí­s en los aspectos carretero, ferroviario, portuario, aeroportuario, hidráulico, hidroagrí­cola y turí­stico.

Por lo anterior, y en el marco de la Primera Reunión de Integración Regional de Gobernadores del Sur-Sureste, efectuada el 9 de octubre, le fue presentada al presidente Felipe Calderón la postura de los nueve mandatarios de los estado que conforman la región, la cual fue expuesta por el gobernador de Tabasco, Andrés Granier Melo.

En el documento se le pidió al Ejecutivo Federal igualar las condiciones del sur con las del centro y el norte del paí­s mediante la asignación de un presupuesto permanente, la creación de un fideicomiso que garantice la disponibilidad multianual de los recursos y la asignación de 50 mil millones de pesos para la ejecución de 93 proyectos prioritarios para esa zona. Asimismo, se solicitó modificar el Programa Nacional de Infraestructura para que el sur-sureste reciba el mismo trato que las otras regiones del paí­s, así­ como fortalecer el Fidesur con mayores recursos para el financiamiento de nuevos proyectos ejecutivos que impulsen el desarrollo de la región.

Y es que según lo anterior, el sur-sureste tiene la riqueza del recurso hidráulico, pero sólo posee el 10 por ciento de infraestructura de riego, mientras el centro y norte concentran el 90 por ciento.

Otro ejemplo es en relación a la infraestructura turí­stica, ya que mientras en Huatulco se plantea un incremento de dos mil 500 cuartos, a la Costa de Nayarit se le dan siete mil 300, tres mil 500 a Loreto y 17 mil 400 cuartos a Cancún.

Ante este panorama, Sada Fernández propuso a las entidades federativas que conforman el sur-sureste mexicano hacer un ejercicio conjunto y coordinado para integrar un documento que sea una contrapropuesta al Programa Nacional de Infraestructura, donde se identifiquen los proyectos prioritarios para la región, se incorporen aquellos que se han quedado fuera de dicho programa federal, y se haga un comparativo de los costos e inversión que estos representarí­an frente a los proyectos que se plantean en al centro y norte del paí­s.