
Partido del Trabajo -VI Informe
Submitted by nadezhda on Vie, 09/01/2006 - 20:01
VI Informe de Gobierno del Lic. Vicente Fox Quesada
Tiene la palabra el diputado Ricardo Cantú Garza, del Partido del Trabajo.
El diputado Ricardo Cantú Garza: Con la venia de la Presidencia. Legisladoras, legisladores.
Los diputados y senadores del Partido del Trabajo asistimos a la apertura del Primer Periodo de Sesiones Ordinarias del Honorable Congreso de la Unión en el que se presenta el VI Informe de Gobierno de Vicente Fox para culminar el artero fraude electoral que se maquina en contra de los millones de mexicanos que votamos por Andrés Manuel López Obrador.
Desde la más alta tribuna de la Nación hacemos el más ferviente llamado a los siete magistrados que integran el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para que no se dejen presionar por las fuerzas fraudulentas y tomen una decisión patriótica, conforme a derecho, para evitar que se consume el fraude en la elección presidencial.
Mexicanas y mexicanos: desde la cúspide del poder, Fox y su camarilla urdieron este atraco electoral; desaforaron a López Obrador con la intención de meterlo a la cárcel e impedir que fuera candidato presidencial, impusieron a los consejeros del Instituto Federal Electoral para que fueran parciales y sumisos y así operar el proceso fraudulento que atropella con vileza a la precaria democracia mexicana.
Fox actuó como "matraquero" de Felipe Calderón y utilizó los recursos públicos a su alcance y el poder del Estado para apoyar al candidato de su partido, convirtiéndose así en el mayor delincuente electoral.
Realizó la campaña de spots más intensa y costosa que presidente alguno haya hecho en la historia de México para inducir a los mexicanos a que votaran por el candidato de la derecha oficialista.
Vicente Fox es un traidor a la democracia y, peor aún, deja al país convertido en un polvorín, a tal grado que en este mismísimo VI Informe de Gobierno se da en condiciones de acoso y cerco policiaco-militar desde hace un mes con un Palacio Legislativo, sitiado por la fuerza pública y secuestrado por el Estado Mayor Presidencial bajo las órdenes directas del Presidente de la República.
Los legisladores del PT repudiamos enérgicamente esta ocupación policiaco-militar que mantiene el Presidente sobre el Poder Legislativo. Ésta fue la tónica de todo el sexenio: el Presidente se confrontó de manera permanente con el Congreso de la Unión y en lugar de privilegiar el diálogo y la negociación, buscó imponer sus decisiones por encima del interés colectivo; nunca se comprometió verdaderamente con una reforma democrática del Estado mexicano ni se fortalecieron las instituciones, tampoco se transformaron; por el contrario, están sumidas en la peor crisis de su historia. No cumplió con una de sus mayores promesas: resolver el conflicto de Chiapas "en 15 minutos".
Peor aún, los indígenas mexicanos viven en condiciones de mayor pobreza que hace quinientos años. El Partido del Trabajo propone que esta nueva Legislatura retome los Acuerdos de San Andrés para que se aprueben tal como fue el compromiso incumplido, hasta ahora, por el Gobierno Federal.
Ante los ojos de los mexicanos solapó las violaciones a los derechos humanos de los pobladores de Salvador Atenco; no aclaró los homicidios en Ciudad Juárez y ha sido incapaz de coadyuvar en la solución del conflicto político en la ciudad de Oaxaca.
En su afán por obedecer dogmáticamente las recetas neoliberales sumió en el estancamiento y en el retroceso de la economía mexicana durante su sexenio. Fox no sólo defraudó electoralmente a los mexicanos, también los defraudó económicamente al no cumplir su promesa de hacer crecer a México en un siete por ciento anual y sólo hacerlo en el pírrico 1.8 por ciento, muy por debajo del crecimiento poblacional.
No se nos olvida que en plena campaña electoral como candidato presidencial, prometió crear un millón 200 mil empleos al año. Nuevamente se burló de los mexicanos porque en este sexenio no hubo empleo. Vicente Fox pasará a la historia como el Presidente del desempleo. Millones de mexicanos tuvieron que emigrar y otros pasarán a formar parte de las filas de la economía informal; y algo gravísimo, muchos terminaron en las filas de la delincuencia. Hablamos de delincuencia común, pero también de delincuencia gubernamental, diríamos, de la delincuencia de Estado, particularmente en lo que se refiere al macrofraude del Fobaproa, el cual representa y sigue siendo el mayor saqueo financiero en la historia económica de este país. Esta bárbara agresión económica contra el pueblo de México, la seguiremos padeciendo; ya ha hipotecado nuestro futuro, el de nuestros hijos y el de nuestros nietos, por lo menos para los próximos 70 años. La cifra es gravísima y escandalosa. Este atraco sin precedente es de más de 120 mil millones de dólares, es decir, de un billón 248 mil millones de pesos, ni más ni menos, superior a la mitad de todo el presupuesto nacional. Por lo mismo es clave, decisivo, fundamental, combatir este gigantesco fraude del Fobaproa, con la finalidad de liberar recursos para contar con fondos suficientes para financiar áreas estratégicas del desarrollo nacional.
En cambio al campo mexicano se le dejó en el olvido millones de ejidatarios, comuneros y pequeños productores rurales, no recibieron los beneficios de este gobierno. En contraste, un reducido grupo de grandes productores enfocados a la exportación de granos, hortalizas y frutas, fueron los únicos beneficiados.
La demanda de revisar el capítulo agropecuario del TLC, se ignoró, por lo cual se perdió la seguridad y la soberanía alimentaria.
Es una vergí¼enza nacional que este gobierno haya obligado a emigrar, según cifras oficiales, a más de cinco millones de mexicanos, arriesgando sus vidas, buscando en otra parte lo que aquí les fue negado.
En lugar de privilegiar la inversión pública en el sector energético, reforzó la estrategia de desmantelamiento y privatización de Pemex y de Comisión Federal de Electricidad, a las que hoy mantiene endeudadas hasta la saciedad, a pesar de ser de las empresas más rentables en nuestro país, con el claro objetivo de entregarlas al gran capital privado nacional e internacional.
Volcó todo su esfuerzo político para imponer una reforma tributaria que castigara a los pobres con IVA en alimentos y medicinas y favoreciera a los ricos cobrándoles menos impuestos al reducir año con año la tasa del impuesto sobre la renta, exentándolos del pago de impuestos en el reparto de dividendos.
Legisladoras y legisladores: el Partido del Trabajo tiene claro que hoy más que nunca es urgente construir un país nuevo que propicie el crecimiento económico con desarrollo social, por el bien de todos; y para ello proponemos: impulsar una reforma hacendaria progresiva y democrática, que desaparezcan los privilegios fiscales que gozan los grandes empresarios; activar la modernización de Pemex y de la Comisión Federal de electricidad y de Luz y Fuerza del Centro, garantizando la propiedad de la Nación sobre estos recursos energéticos.
Promover la creación del Banco de Financiamiento a la Planta Productiva, para impulsar la economía de las micro, pequeñas y medianas empresas así como de cooperativas de la ciudad y del campo.
Promover la aprobación de recursos públicos, para instaurar programas y proyectos productivos que promuevan el empleo y combaten eficazmente la pobreza y la inmigración.
Fomentar un nuevo federalismo económico fiscal, que rompa con la centralización de los recursos públicos.
Potenciar una reforma constitucional, para incorporar las figuras de la democracia participativa directa, como el referéndum, el plebiscito y la revocación de mandato, entre otras, que garanticen la participación del pueblo en la toma de las decisiones fundamentales que orienten el rumbo del país.
Incorporar el voto electrónico como parte de una amplia reforma electoral democrática y progresista, para que se fortalezcan las instituciones electorales y dejen de ser instrumento de manipulación fraudulenta del voto popular, teniendo como condición impostergable la destitución inmediata de los actuales consejeros del IFE.
Convocar a una reforma de Ley Orgánica del Congreso de la Unión, para facilitar la constitución de grupos parlamentarios en el Senado de la República, la integración pluripartidista e incluyente de la Mesa Directiva y de la Junta de Coordinación Política, tanto en la Cámara de Diputados como en la Cámara de Senadores.
Avivar las reformas necesarias que construyan un nuevo marco jurídico, para garantizar justicia y seguridad pública verdaderas.
Propiciar las reformas a la legislación mexicana, con la finalidad de que la estimulación temprana y la educación inicial, sean parte fundamental del sistema educativo nacional.
Pueblo de México, la Nación ansía y demanda con denuedo la verdadera transformación de la república. La poderosa Convención Nacional Democrática en marcha, sintetiza los sueños, anhelos y aspiraciones libertarias más genuinas de la historia de nuestro pueblo.
El PT está orgulloso de tomar parte de este ejemplar proceso. Llamamos a todas y todos los mexicanos, de convicciones morales sólidas y genuinas, a integrarnos a esta gran lucha convencionista, porque como lo dijo Benito Juárez: "El pueblo que quiere ser libre, lo será". Y algo enseñó que el poder de los reyes es demasiado débil, cuando gobierna contra la voluntad de los pueblos.
Que no quede duda, el Partido del Trabajo, sus diputados y senadores, no vacilaremos en seguir luchando por un México nuevo, en el que prevalezca la justicia social, la igualdad política y el desarrollo económico, para que vivamos con libertad, democracia y dignidad.
Por su atención muchas gracias.