
¿Cómo entender la lucha de AMLO?
Submitted by nadezhda on Mié, 11/15/2006 - 09:09
Juan Solís Castro
Redacción/Cambio de Michoacán
Miércoles 15 de Noviembre de 2006
Después de las elecciones del 2 de julio, Andrés Manuel López Obrador ha sido objeto de fuertes críticas en las que le atribuyen adjetivos como
«loco, mesiánico, resentido social », e indirectamente Fox le ha atribuido el de «renegado »; críticas a las que considero parciales y poco objetivas por las siguientes consideraciones:
En primer término he de señalar que en todo ejercicio de poder, debe existir un contrapoder; porque de lo contrario el primero de ellos tiende a deformarse y se convierte en absolutismo. Es en la figura del contrapoder donde se debe ubicar la lucha de AMLO, porque a pesar de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación declaró presidente electo a Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, AMLO siguió en su movimiento político; llevándose a cabo el 16 de septiembre la Convención Nacional Democrática, la cual ya ha tenido sus primeros resultados al conformarse el Frente Amplio Progresista.
En su visita a esta capital, AMLO manifestó que uno de los objetivos de su movimiento es defender el patrimonio nacional, por lo que se espera una fuerte lucha social contra cualquier intento de privatización. Ante este escenario, los legisladores del PAN han presentado su agenda legislativa con un supuesto «sentido social », no porque les preocupe o les interese abatir la pobreza y lograr la igualdad social, sino porque en este momento no les conviene expresar en propuestas sus verdaderas intenciones de privatización; porque con ello le darían armas a López Obrador para fortalecer su movimiento, pero a pesar de eso no ocultan su desmedida ambición de poder al proponer la reelección consecutiva de diputados, senadores, regidores, síndicos y presidentes municipales.
Se ha manifestado en diversos medios que esta lucha emprendida por AMLO le ha costado la pérdida de capital político, de simpatía y que por lo tanto no es una manera inteligente de actuar; sin embargo, de haber mostrado indiferencia y apatía ante la realidad social, hubiese sido adoptar una actitud egoísta, mezquina, electorera, clientelar, porque a costa de conservar su capital político hubiese abandonado a la clase social más vulnerable; por ello es conveniente considerar y valorar que la política no inicia en una campaña, ni tampoco termina en una jornada electoral; la política comienza con el nacimiento del hombre y ésta se vive todos los días, y en atención a ello es preciso mantener a una ciudadanía movilizada, atenta a las acciones y decisiones de los diferentes órganos de gobierno, para que éstos no sólo no digan tonterías, sino también para que no las hagan y asuman verdaderamente una política dirigida al sector social que se ha visto excluido.
Por todo lo expuesto, el movimiento de AMLO debe ser entendido como una forma de contrapoder, que debe buscar que las acciones de gobierno no sólo beneficien a las élites poderosas, sino que también se desarrollen programas enfocados a mejorar las condiciones de vida del grueso de la población, por eso durante el siguiente sexenio el buen, regular o mal desempeño de Calderón se verá reflejado en las calles. Finalmente es importante señalar que este movimiento iniciado por AMLO también tiene sus riesgos, y uno de ellos es que se desborde en la violencia, y de ser así se perdería su sentido social, es aquí donde radica el principal reto de López Obrador.