El jueves 11 de enero, Ciro Gómez Leyva publica en su columna en Milenio el siguiente texto, simplemente bajo el tí­tulo El notario Miguel Alessio Robles. Da miedo ver los antecedentes de quien ahora es el subsecretario de Asuntos Jurí­dicos y Derechos Humanos. Cito el texto:

El titular de la Notarí­a 19 del Distrito Federal, Miguel Alessio Robles, fue designado el martes subsecretario de Asuntos Jurí­dicos y Derechos Humanos de la Secretarí­a de Gobernación. Al presentarlo, el secretario Francisco Ramí­rez Acuña dijo que tendrá la responsabilidad de difundir la cultura de la legalidad y la vigencia del estado de derecho en todo el paí­s

Qué interesante que el hombre a quien Ramí­rez Acuña le ha pedido también supervisar la compilación y difusión del orden jurí­dico nacionalá sea un personaje controvertido, cuestionado.

La notarí­a de Miguel Alessio Robles, por citar un caso, protocolizó en 2005 y 2006 las asambleas de Televisora del Valle de México, convocadas por un accionista que tení­a el cinco por ciento de la propiedad de la empresa, y contra la voluntad del accionista que tiene el 95 por ciento. El objetivo de esas asambleas era entregarle el Canal 40 a Tv Azteca y consumar uno de los despojos más soeces de que se tenga memoria en los últimos años; un pillaje digno de una república bananera.

Miguel Alessio Robles es, pues, un especialista en derecho mercantil que, vaya a saber Dios por qué causa, protocolizó actas de asambleas notoriamente fraudulentas y nulas, gracias a las cuales Tv Azteca, un accionista prendario, montó su operativo para usar una frecuencia de televisión que no le pertenece, pero de la que puede disponer gracias a decisiones incidentales y precautorias, bendecidas entre muchos otros por el notario y hoy subsecretario de Asuntos Jurí­dicos y Derechos Humanos de la Secretarí­a de Gobernación.

Felipe Calderón prometió dar seguridad jurí­dica a todos los mexicanos; a todos. Y miren en manos de quiénes nos está poniendo.