Wilfrido Robledo presenta su renuncia

Veamos pues qué nos deja ver la nota que reproduzco a continuación, Señalado por abusos en Atenco y nepotismo, dimite Wilfrido Robledo, publicada hoy en La Jornada:

  • Robledo lleva nueve meses ejerciendo su cargo, sin siquiera un tirón de orejas por una de las operaciones de represión más descaradas y brutales de la historia reciente de nuestro paí­s
  • Además de todo, al más puro y corrupto estilo de la burocracia prií­sta, dió un puesto a alguien ligeramente cercano a él: Su hijo.
  • El gobierno estatal ha iniciado investigaciones y levantado sanciones administrativas contra 23 policí­as, imputándoles cargos no graves - Apenas el 1% de la fuerza pacificadora que envió a golpear y violar, cuya desmedida brutalidad está plenamente documentada
  • No es suficiente con esto: Peña Nieto lo designó sabiendo que Robledo estaba inhabilitado para laborar en el gobierno federal por irregularidades en la adquisición de helicópteros mientras comandó la PFP - Se sacudió la acusación con una brillantez digna del expresidente Fox

Sorpresivamente renuncia al cargo de comisionado de seguridad mexiquense
Señalado por abusos en Atenco y nepotismo, dimite Wilfrido Robledo
ISRAEL DAVILA CORRESPONSAL
Toluca, Méx. 8 de febrero. Luego de nueve meses de estar inmerso en la polémica por los abusos policiacos cometidos en San Salvador Atenco en mayo pasado, y por los actos de nepotismo en que incurrió al emplear a su hijo, Mario Robledo Segura, como subdirector de los cuerpos auxiliares del estado de México, el vicealmirante Wilfrido Robledo Madrid, renunció hoy al cargo de comisionado de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE).

Oficialmente se dijo que el también ex comisionado de la Policí­a Federal Preventiva (PFP) dimitió con carácter de irrevocable el mediodí­a de este jueves, pero personal de la ASE aseguró que le fue solicitada su separación del cargo; su oficina de comunicación social habí­a extendido invitaciones para un acto este viernes, el cual serí­a encabezado por el propio Robledo Madrid en el municipio de Tlalnepantla.

En su lugar fue designado Héctor Jiménez Baca, quien hasta hace unas horas ocupó la Subsecretarí­a de Gobernación en la región del valle de Toluca.

La renuncia de Wilfrido Robledo Madrid ocurrió horas después de que el gobernador Enrique Peña se comprometió a castigar a los responsables de los abusos durante la incursión policiaca en Atenco, una vez que conoció que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó investigar los acontecimientos suscitados los dí­as 3 y 4 de mayo de 2006 en ese municipio del oriente de la entidad, con saldo de más de cien lesionados y 200 detenidos.

Diversos organismos, como la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la Comisión Civil Internacional de Derechos Humanos, el Centro Agustí­n Pro y hasta Amnistí­a Internacional han acreditado que en los operativos policiacos efectuados en Atenco y en el traslado de los detenidos al penal de Santiaguito no sólo hubo exceso de violencia, sino actos de tortura y abusos de orden sexual en contra de mujeres.

A pesar de que el gobierno mexiquense admitió las recomendaciones de la CNDH, siempre se negó a proceder en contra de los responsables de ejecutar dicho operativo.

Hasta ahora se ha castigado administrativamente a 23 de los más de 2 mil uniformados21 son sujetos a proceso penal; sin embargo, ninguno de ellos ha pisado la cárcel por tener el beneficio de la libertad bajo caución, al imputárseles delitos no graves, como abuso de autoridad y actos libidinosos.

Una vez que conoció la determinación de la SCJN, Peña Nieto modificó su discurso. Mencionó que si de esta indagatoria se desprendí­a responsabilidad de más elementos policiacos o funcionarios, se actuarí­a conforme a derecho. Horas después ocurrió la renuncia de Robledo Madrid.

Además, se supo que la Contralorí­a del estado tení­a lista la resolución del procedimiento administrativo iniciado en contra del vicealmirante por nepotismo, la cual lo encontraba responsable.

El pasado 19 de septiembre, durante una comparencia ante diputados locales, legisladores del PRD pusieron al descubierto que Wilfrido Robledo habí­a empleado a su hijo Mario Robledo en los cuerpos de seguridad auxiliar, dependientes de la ASE.

En esa ocasión, el vicealmirante reconoció haber ayudado a su hijo a entrar a los cuerpos de seguridad, pero se justificó y dijo que legalmente nada se lo impedí­a, ya que este cuerpo de seguridad auxiliar es autónomo económicamente.

Al concluir la comparecencia, se le entrevistó y reconoció que sí­ influyó para que se contratara a su hijo Mario Robledo Segura en los cuerpos de seguridad auxiliar, y agregó: "qué padre no ayuda a su hijo, hombre".

La investigación la inició la contralorí­a interna de la Secretarí­a General de Gobierno, pero luego fue atraí­da por la Secretarí­a de la Contralorí­a para investigar si Robledo habí­a incurrido en una falta administrativa.

Wilfrido Robledo llegó al estado de México por invitación del gobernador Enrique Peña. El 15 de septiembre de 2005 se anunció que el vicealmirante estarí­a al frente de la policí­a estatal.

Su llegada no fue tersa. Estuvo precedida de cuestionamientos por una inhabilitación que le hizo la Secretarí­a de la Función Pública por detectar irregularidades en la adquisición de helicópteros en la Policí­a Federal Preventiva, cuando Robledo la encabezaba.

El gobernador mexiquense justificó que la inhabilitación de Robledo Madrid sólo era efectiva para ocupar un cargo federal, pero no estatal o municipal, por lo que no se violentaba ninguna ley.

Posteriormente, el 2 de febrero de 2006, el mandatario le encomendó hacerse cargo de la ASE, dependencia que aún es cuestionada por diputados locales, puesto que no tiene sustento legal en el marco jurí­dico del estado, toda vez que no se hicieron las modificaciones pertinentes para su creación y operación.