Me encuentro con esta nota (que reproduzco a continuación) el dí­a de hoy en La Jornada. Se me hace increí­ble cómo se sigue impulsando este modelo, fomentado por el gobierno de los Estados Unidos, esperando que tenga resultados creí­bles, cuando es justo lo contrario lo que tiene resultados: Una militarización de los puntos fronterizos desanima a muy pocos candidatos a inmigrante ilegal. Los centroamericanos que vienen a México a buscar trabajo ilegal o paso hacia los Estados Unidos no vienen a admirar nuestras bellezas naturales, ni a admirar nuestros estúpidos circos polí­ticos - Vienen porque están desesperados, porque no les queda ya nada más que perder en sus tierras. ¿Arriesgar la vida? Con gusto, para que la familia pueda comer.

Si queremos evitar la migración de Centroamérica, hay que fomentar iniciativas regionales que aumenten la capacidad de un campesino u obrero para generar dinero para sobrevivir en casa. Si queremos evitar la migración de mexicanos hacia los Estados Unidos, hay que invertir en hacer del campo o del trabajo obrero no calificado algo digno. Si Estados Unidos quiere menos latinoamericanos en su paí­s, debe buscar fomentar ví­as para que los paí­ses sean menos expulsores.

Me centro en el ejemplo de la Unión Europea. ¿Cómo lograron salir de su atraso España, Grecia, y ahora más de 15 paí­ses que se han incorporado al paso de los años, y que estaban en un nivel socioeconómico similar o inferior al nuestro? No, no a través de fronteras seguras (muy al contrario, en Europa se abolió por completo el concepto tradicional de frontera), sino que a través de un programa de décadas de duración en que parte importante de los impuestos recaudados en los paí­ses y regiones más prósperos se invertí­an en mejorar a los más pobres.

Se debe poner especial cuidado en los puntos fronterizos: Andrés Granier
Proponen gobernadores que el Ejército tome el control en el sur-sureste del paí­s

CLAUDIA HERRERA BELTRAN ENVIADA

Campeche, Camp., 10 de abril. Los gobernadores del sur-sureste reunidos en el contexto de la Cumbre del Plan Puebla-Panamá acordaron integrar un bloque en contra del crimen organizado, y para ello propusieron que se ejerza un control militar en la región, particularmente en los puntos fronterizos, explicó el gobernador de Tabasco, Andrés Granier.

El mandatario refirió que no pueden permitir que en el sur mexicano se extienda "lo que está pasando en los estados del norte. Estamos a tiempo para poder frenarlo".

El gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, confirmó que nueve gobernadores de la región acordaron emprender acciones de cooperación y coordinación, pero aclaró que ello no implica un acuerdo de "ocupación militar".

Sin embargo, Granier fue enfático en demandar la participación del Ejército Mexicano en estas acciones. "La propuesta es un control militar en toda la región con los puertos fronterizos adecuados, como el que está concluido en El Ceibo, en el municipio de Tenosique, Tabasco".

Luego matizó la propuesta al señalar que no necesariamente piden la militarización del combate al narcotráfico, pero sí­ que necesitan la presencia de fuerzas federales en la frontera, con el propósito de regular el paso migratorio, "que es uno de los graves problemas que tenemos, ya que eso conlleva paso de armas y de drogas".

Con el argumento de que los problemas ocurridos en un estado afectan a otros, señaló que buscarán establecer coordinación, inclusive reconoció que las autoridades de alguna manera han quedado rebasadas.

Anfitrión de la cumbre del Plan Puebla-Panamá, el gobernador de Campeche, Jorge Carlos Hurtado, explicó que buena parte de la reuniones que sostuvieron con el presidente Felipe Calderón fueron dedicadas al tema de seguridad, y señaló que el mandatario federal "vio con buenos ojos" su decisión de elaborar una estrategia regional para enfrentar este problema.